Reducir Costos y Optimizar la Utilización de Equipos Médicos
Recupera la eficiencia operativa mediante la reparación y mantenimiento de equipos biomédicos. Esta solución prolonga la vida útil de los dispositivos médicos, evitando compras costosas de equipos nuevos. Mantener los equipos en óptimas condiciones minimiza las interrupciones en los servicios de salud, mejorando el cuidado de los pacientes y el uso de los recursos disponibles. Además, optimizar el rendimiento reduce las fallas inesperadas, mejorando la fiabilidad y seguridad en el entorno clínico.
Desafíos Complejos para el Equipo de Ingeniería Clínica Moderna
Con el avance de la tecnología sanitaria a un ritmo sin precedentes, muchos departamentos de ingeniería clínica de hospitales tienen dificultades para mantener el ritmo. Además, el volumen de equipos médicos móviles ha aumentado aproximadamente un 90 % en los últimos 20 años. Es probable que la plantilla de su equipo de gestión de tecnología sanitaria no haya crecido al mismo ritmo. Como resultado, es probable que tenga que lidiar con retrasos en la reparación de equipos biomédicos, gestionar proveedores y un mayor número de contratos de servicio. El gran volumen de estos retrasos en la reparación y el mantenimiento biomédicos, junto con los aumentos impredecibles de la demanda, suele dejar a los departamentos de gestión de tecnología sanitaria como el suyo frustrados y buscando soluciones.
Acompañamiento Técnico para el Manejo Seguro y Efectivo del Equipo Médico
Garantiza el funcionamiento óptimo de tu equipo con nuestro acompañamiento especializado desde la instalación hasta su correcta operación. Capacítate con asesoría técnica continua y práctica para que tu personal domine el manejo seguro, preciso y eficiente de los dispositivos, maximizando así el rendimiento de tu inversión tecnológica y elevando la calidad del servicio médico.
Uso Inadecuado de Tecnología Médica por Falta de Preparación Técnica
En muchos centros de salud, los equipos médicos son instalados sin una orientación adecuada para el personal que los operará. Esto genera errores en su uso, disminuye la vida útil del equipo, pone en riesgo la atención al paciente y provoca gastos innecesarios en reparaciones o sustituciones. La falta de capacitación técnica inmediata tras la instalación es una de las principales causas de estos problemas operativos.
